martes, 22 de junio de 2010

Ambiguo...

Tú eres ambiguo, Yo soy ambiguo, el mundo es ambiguo… Definitivamente esta palabra es confusa como su significado, pero el ser humano en esencia lo es y lo que lo rodea también. Según la RAE ambiguo, es algo incierto, dudoso, ¿Suena a algo conocido? La indecisión, nos asalta día a día, la incertidumbre nos invade cada vez que hacemos algo. Nunca sabemos cómo van a resultar las cosas, la mayor parte de las veces somos malinterpretados por lo que decimos, por nuestros gestos, hasta por el tono que utilizamos al conversar no nos entienden como queremos, nos cuesta expresarnos, por esto, somos motivo de dudas, de incertidumbre y confusión… ¿Vuelve esto a sonar conocido? Cada ser humano, tiene algo que lo diferencia del resto, somos únicos, nunca encontraremos a alguien que sea igual a nosotros ni física ni psíquicamente, cada persona tiene perspectivas distintas para ver las cosas. Existen personas positivas, negativas, emocionales, racionales, gritonas, calladas, tímidos, fuertes, débiles heterosexuales, homosexuales, bisexuales, etc., etc.

Somos la realidad e irrealidad, muchas veces nuestra imaginación nos hace vivir situaciones que parecen de verdad pero que es mentira, es tan sólo una especulación de lo que podría suceder o lo que realmente queremos que suceda

Estamos fragmentados al sentir contradictoriamente, sentirse solo, aburrirse de la compañía, ser común pero querer sobresalir al mismo tiempo, estar triste, estar feliz, amar, odiar, reír, llorar, vivir, morir…

¿Quién dijo que vivir era fácil? Nadie nos enseña cómo enfrentar situaciones difíciles, nadie nos dice que hacer, que sentir, que decir, que pensar, en resumidas cuentas cómo hay que vivir. La contradicción abunda, sobretodo en nuestros sentimientos.

El arte, la música, los libros, las leyes, la naturaleza, el universo es ambiguo. Demostrando una vez más, lo malo y lo bueno, la vida y la muerte, somos todo… somos nada